El desarrollo de una cultura de altas expectativas en el aula depende, en gran medida, del compromiso y liderazgo de los docentes. Son ellos quienes, a través de su ejemplo y convicción, pueden inspirar a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial. Este taller tiene como objetivo fortalecer la capacidad de los profesores para establecer y promover expectativas altas, impulsando una actitud de excelencia, rigor y autoexigencia tanto en su práctica pedagógica como en el comportamiento de los alumnos. Al asumir un rol activo en la creación de un entorno desafiante y motivador, los docentes contribuyen significativamente al éxito académico y personal de sus estudiantes.